Chakra Plexo Solar

 ASIA

Regula el poder, la voluntad, el metabolismo, la soltura, el humor, el control, la autoridad, la agresividad, el guerrero, la transformación, la calidez, la vitalidad, la perseverancia y la eficacia. Su elemento es el fuego. Su color es el amarillo.

Gobierna la creación y la expansión de la energía del organismo. Físicamente se encarga de la asimilación de los alimentos y del agua, de transformarlos en calor y energía, y psicológicamente se encarga del poder personal, la voluntad.

Este chakra activa y comunica, potencia al plexo solar y a todo el sistema, es decir a todo el cuerpo. Es la fuente de la energía.
Asia, representada en su mayor parte por Japón, China y Tibet, son los centros de la disciplina espiritual, de los guerrenos de la voluntad y la sabiduría. Este centro es un poderoso transformador de energía y dador de vitalidad para el mundo.

El poder aumenta cuando se combinan los aspectos masculino y femenino, la personalidad luminosa y la sombra, la fuerza y la vulnerabilidad. La voluntad es nuestra energía vital dirigida de manera consiente a un fin. Tratar este chakra implica considerar nuestra vida como producto de nuestra voluntad. Y para trabajarla podemos acudir al Guerrero Espiritual, que irradia la sensación de estar preparado para luchar con valentía. Sin abusar del poder y con honor. 

Un déficit de energía en el 3º chakra origina hipoglucemia, mala digestión o mala asimilación de los alimentos. La obesidad está relacionada también con este chakra, la fatiga crónica  como consecuencia de una adicción o de una enfermedad. Timidez, actitud de sumisión ante la vida. Trastornos digestivos. Miedo a asumir el poder o el control, a defender las propias convicciones. La adicción a la cafeína, al azúcar, anfetaminas o cocaína son consecuencia de una debilidad esencial en cuanto al sentimiento del propio poder y la vitalidad.
La típica imagen de Buda, es un reflejo de la importancia del Plexo en la cultura asiática. Las medicinas y la doctrina de salud y alimentación son la base que nos obsequia este chakra de la humanidad como reconocimiento de su energía.

Un exceso de energía produce úlceras o diabetes, adicción a sustancias sedantes como alcohol, tranquilizantes o los opiáceos, movidos por la el afán de apaciguar el sistema nervioso hiperactivo, una consecuencia  del exceso de energía en este chakra orina barriga abdominal excesiva. También origina afán de mando, dominar a los demás o parecer superior. Precipitación, cólera incontenible y frecuente, úlceras de estómago.

La baja autoestima y el sentido oculto de la vergüenza son consecuencia tanto de un exceso como de un defecto del chakra ombligo.
Todas estas descripciones, han mostrado cómo en el auge de las culturas asiáticas, todas han pasado por un exceso emocional bañado por la energía de este centro de poder.

Y ya sabemos que todo en defecto o exceso es malo, y que se debe buscar y encontrar un equilibrio en todo.